Joe Biden gana fuerza en elecciones primarias demócratas tras Súper Martes

Estados Unidos 

El ex Vice presidente Joe Biden se posicionó ayer como un sólido competidor por la candidatura presidencial demócrata tras salir victorioso en cinco estados sureños -Virginia, Carolina del Norte, Tennessee, Alabama y Texas- demostrando su fuerza entre los electores afroamericanos y asestando un golpe al Senador Bernie Sanders.

Joe Biden celebra triunfo en Super Martes

Con la victoria en Texas, Biden asestó otro golpe ya que es el segundo estado con mayor botín de delegados y se mantiene a la cabeza en Maine, aunque no tiene asegurada la victoria en aquí ya que Sanders le sigue muy de cerca, por lo que habrá que esperar el resultado oficial.

Sanders se llevó fácilmente Vermont, de donde es originario, Colorado y Utah. Pero su más importante victoria, tal y como lo habían anticipado las encuestas, fue California, entidad que reparte la mayor cantidad de delegados (415).

Biden tuvo un mal comienzo en la contienda demócrata luego de haber perdido en las tres primeras citas (Iowa, Nuevo Hampshire y Nevada), pero se recuperó con una aplastante victoria en Carolina del Sur el sábado pasado.

Al igual que en esa entidad, el ex Vicepresidente triunfó ayer en los cuatro estados del sur gracias, en gran parte, al electorado negro: más del 60 por ciento de los afroamericanos votaron por él.

Además, en Virginia y Carolina del Norte, dos estados llenos de suburbios, Biden obtuvo un buen desempeño con un grupo demográfico que fue crucial para el éxito del partido en las elecciones de medio término de 2018: mujeres blancas con educación universitaria.

Por su parte, Sanders continúa demostrando fuerza entre los electores que han conformado su base política: aquellos debajo de los 40 años de edad. Pero su incapacidad de ampliar su atractivo hacia votantes de mayor edad y afroamericanos condenaron su candidatura en dos estados clave en los que había hecho campaña con fuerza: Virginia y Carolina del Norte- tal y como le pasó en Carolina del Sur.

Apenas el lunes se dio un replanteamiento extraordinario de la carrera, cuando candidatos moderados se aliaron para formar un frente contra Sanders, quien se define como un demócrata socialista y cuyas perspectivas generales de la elección son vistas con escepticismo por gran parte del liderazgo de su partido.

La arrasadora victoria de Biden el sábado en Carolina del Sur lo posicionó como el claro favorito en el ala centrista de los demócratas, llevando a dos de sus rivales -la Senadora por Minnesota, Amy Klobuchar, y el ex Alcalde de South Bend, Indiana, Pete Buttigieg- a abandonar sus candidaturas y ofrecer su respaldo al ex vicepresidente.

De hecho, Biden triunfó en Minnesota y también le arrebató Massachusetts a su aún rival, la Senadora Elizabeth Warren, y a Sanders, quien también dio pelea en la entidad. Al igual que en Virginia, en Massachusetts los senadores se encontraban por arriba del ex vicepresidente en las encuestas.

Las contiendas del Súper Martes (14 estados y un territorio) estaban destinadas a proporcionar a los aspirantes a la candidatura presidencial una primera prueba a una escala verdaderamente nacional. A diferencia de la mayoría de los estados pequeños que tuvieron primarias y caucus una a una en febrero, las elecciones simultáneas de ayer representaron una muestra diversa de las comunidades y circunscripciones que conforman el electorado estadounidense.

Sanders tenía la esperanza, de cara a la fecha, de poder acumular una ventaja insuperable en el conteo de delegados. Biden pretendía impedir eso y hacer un poco más, al unir fuerzas moderadas en el Partido Demócrata bajo una sola bandera por primera vez en la carrera. 

Con información de The New York Times, Marzo 4, 2020