El Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo que planeaba recibir pronto en la Casa Blanca a su homólogo mexicano, Andrés Manuel López Obrador, durante una visita a Yuma, Arizona, para revisar el avance del muro fronterizo.
“Quiero darle las gracias al presidente de México. Creo que vendrá a Washington bastante pronto, a la Casa Blanca”, dijo el Mandatario sin dar más detalles.
Trump visitó este martes Yuma para inspeccionar una parte de la barrera fronteriza construida en esa localidad, una de sus principales promesas de campaña.
Ahí, el Mandatario aseguró que el muro, del cual presumió nuevamente su estructura, no sólo había detenido la inmigración ilegal, sino también el COVID-19.
“Detuvo el COVID-19, detuvo todo”, enfatizó Trump en escuetas declaraciones a los medios.
La visita del Presidente de Estados Unidos a Arizona tenía como objetivo celebrar la culminación de más de 320 kilómetros de la nueva barrera en la frontera.
Trump aseguró que los acuerdos migratorios con México, Guatemala, Honduras y El Salvador, así como la decisión de negar la entrada al país a todos los solicitantes de asilo debido a la pandemia, han prevenido una catástrofe de coronavirus en la frontera sur.
“Sin estas medidas, la frontera sur sería un epicentro global de la transmisión del virus”, agregó el Presidente Trump.
Al igual que en una visita a otra sección del muro en California el año pasado, Trump firmó hoy la parte de Arizona, que lucía pintada en algunos tramos de negro, justo como él había pedido.
Para impedir que Trump impusiera aranceles a todas las importaciones mexicanas, México firmó hace un año un acuerdo por el que EU devuelve a su territorio a los indocumentados que llegan a la frontera común y solicitan asilo en el país del norte, para que esperen allí durante meses a que se resuelvan sus trámites.
Con esta acción, Donald Trump busca recobrar impulso para su campaña de reelección, tras el evento del fin de semana en Tulsa, Oklahoma, que se suponía fuera una señal de la reapertura del país y un despliegue de fuerza política.
No obstante, tuvo miles de asientos vacíos y generó dudas sobre el liderazgo de la campaña del residente y sus aspiraciones de reelección.
La baja asistencia centró aún más la atención en la visita de Trump a Arizona, un estado sin clara preferencia política y un creciente foco de infección del coronavirus.
Con información de EFE y de AP, 23 de junio del 2020